La base de maquillaje está diseñada para unificar el tono de la piel y proporcionar un acabado uniforme, pero surge una pregunta común: ¿debería aplicarse solo en la cara o también en el cuello? La respuesta corta es sí, también en el cuello, y aquí te explicamos por qué:
1. Para evitar el efecto "máscara"
Aplicar la base únicamente en el rostro puede crear una diferencia de tono notable entre la cara y el cuello, especialmente si estos no son del mismo color debido a la exposición solar o a la pigmentación natural. Extender la base al cuello asegura una transición suave y natural.
2. Unificar el tono de piel
El cuello a menudo tiene un tono más claro que el rostro debido a su menor exposición al sol. Aplicar una ligera capa de base en el cuello ayuda a unificar el tono de toda el área visible, creando un look más pulido.
3. Menos es más en el cuello
Aunque es importante aplicar algo de base en el cuello, no necesitas la misma cantidad que usas en el rostro. Una capa ligera, bien difuminada, es suficiente para lograr un acabado armonioso sin sensación de pesadez.
4. Elige la base correcta
Usar una base que se adapte perfectamente a tu tono de piel minimiza la necesidad de extenderla mucho más allá del rostro. Sin embargo, en eventos especiales o maquillajes más elaborados, aplicar un poco de base en el cuello es casi obligatorio.
5. No olvides el cuidado del cuello
Antes de aplicar maquillaje, asegúrate de que tanto tu rostro como tu cuello estén hidratados. Esto no solo ayuda a que la base se difumine mejor, sino que también protege la piel del cuello, que es delicada y más propensa a mostrar signos de envejecimiento.
Conclusión
Para un maquillaje impecable, aplica la base de maquillaje tanto en el rostro como en el cuello, difuminándola bien para evitar líneas de demarcación. Este paso extra hará que tu look se vea más natural y profesional.